TIMONAZO

No importó que apenas dos meses atrás el equipo hubiera sido campeón, con apenas 7 jornadas del segundo torneo se ha anunciado por parte de Club el retiro del cuerpo técnico que había conseguido aquel logro que aportó la cuota inicial del ascenso.

Juan David Niño como técnico, Carlos Giraldo como asistente y Mauricio Molina como preparador físico han sido apartados, pero no retirados, del Club, tal como reza el comunicado oficial. Decisión que aunque tenía algunas voces favorables en la hinchada no parecía que fuera a darse con solo 6 partidos jugados y más cuando se hablaba de un “proceso” a largo plazo con el cuero técnico que hoy deja sus cargos.

Esta acción representa un remezón que seguramente busca mejorar los resultados que hoy tienen al equipo en la cola del campeonato, un rendimiento del 27% que sin duda es pobre pero que seguramente es multicausal, quizá un mayor porcentaje de este desempeño sea achacable a la falta de refuerzos de jerarquía, seguido además del bajo nivel de jugadores que fueron protagonistas en el título.

El cuerpo técnico sin duda tiene responsabilidad, principalmente por no exigir una mejor plantilla, el equipo logró el campeonato con una nómina muy corta pero desde la pretemporada ya eran visibles las deficiencias sobre todo en ataque, tan frágil es el equipo que la salida de un solo jugador de postín como Luis Payares ha causado el desbarajuste defensivo que ha costado partidos y puntos.

Se habla de un técnico español para remplazar a Juan David Niño, el entrenador Matías Jonathan Risueño Lujan, exjugador principalmente de la B española, y con experiencia en equipos regionales de su país. En Colombia dirigió al Bogotá FC sin mucho suceso. Es posible que mañana haya una confirmación al respecto.

Al cuerpo técnico que hoy sale, un agradecimiento por el título y el deseo de éxitos en sus nuevos proyectos o roles, ya quedaron grabados en la historia del Club con el segundo campeonato de la “B” que ha obtenido el rojo boyacense.